En el marco del Día Mundial de la psoriasis, la psicóloga Sandra Ros del servicio de dermatología y reumatología del hospital de la Santa Creu i Sant Pau en Barcelona, habló sobre la importancia de aprender a convivir con esta enfermedad. La psoriasis es una enfermedad visible en un mundo donde la imagen es muy importante, lo que puede generar un gran impacto emocional. La especialista resalta que es necesario entender la situación en la que se encuentra la persona que ha sido diagnosticada con psoriasis y conocer sus síntomas y tratamientos disponibles.
La psoriasis no solo afecta la piel, sino que también puede afectar el equilibrio psicológico y psicosocial de las personas. Por ello, la psicología es un factor importante en el abordaje multidisciplinar que requiere esta enfermedad. La ansiedad, la tristeza, la personalidad y los miedos son factores que pueden influir en el curso de la enfermedad y en cómo se afronta la misma.
Aceptar la enfermedad no significa resignación pasiva, sino ir adaptándose conforme la enfermedad evoluciona. Es importante buscar información, conocer la enfermedad, sus síntomas y tratamientos, y tener una actitud proactiva para afrontarla. Además, es necesario trabajar en aspectos que dependen de nosotros, como llevar una dieta saludable, realizar ejercicio físico adecuado, realizar los tratamientos prescritos, gestionar el estrés, trabajar en nuestro estado anímico y pedir ayuda cuando sea necesario.
Otro aspecto importante es compartir nuestras emociones y necesidades con nuestro entorno, lo que puede ayudarnos a no sentirnos solos y a manejar los sentimientos de tristeza, ansiedad y soledad que la enfermedad puede provocar. Por último, la especialista destaca la importancia de trabajar en la resiliencia y de buscar apoyo en los profesionales sanitarios para convivir con la psoriasis y mejorar nuestra calidad de vida.
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